martes, 27 de agosto de 2013

Real Genius Theory

Dice Patrick Cassels en su blog 10 year old movies:

Most fascinating, though, a decade has also proven Down to You to be another example of the “Real Genius Theory” of teen movie’s fickle stardom, which states that a given actor in a teen comedy playing the crazy friend (X), given a few years’ time (T), will prove infinitely more successful than the film’s actual star (Y). The lead of Real Genius was technically Gabriel Jarret, but it was his wild and unpredictable roommate Val Kilmer who would go on to fly jets with Tom Cruise.

Similarly, the stars of Down to You are technically Julia Styles are and Freddie Prinze Jr., but 10 years later their crazy friends Rosario Dawson and Ashton Kutcher are the ones starring in Sin City and fucking Demi Moore while Prinze Jr. fans wonder if the six aired episodes ABC’s Freddie will be released on DVD. Thus proving, once again, (XT) > Y, just like Wiley Wiggins vs. Matthew McConaughey in Dazed and Confused, Ethan Embry vs. Seth Green in Can’t Hardly Wait, and Jeremy London vs. Jason Lee in Mallrats did.
A rare exception to this rule is Risky Business. And to be honest I’ve always considered Curtis Hanson and Bronson Pinchot to be more famous than Tom Cruise.

domingo, 9 de junio de 2013

1 pax

Una serie de circunstancias llevaron a que esté durmiendo en la cama que fue de mis padres y que mi mama regaló hace más de dos años. 
Cuando me despierto y cuando me acuesto, en el centro geométrico de las dos plazas y usando las dos mesas de luz a la vez, me sorprende que sea tan chica, lo cómoda que puede dormir una persona en una cama para dos. Vivo en el departamento de dos personas, y prácticamente no me sobra espacio. Es fácil  parece, ocupar todo el espacio disponible, como los gases. 
Pero a la vez, también parece fácil por el contrario que dos personas entren en una vida para uno. Miro a la gente por la calle y me esfuerzo por imaginar como sería hacer lugar para otro, si en mis días se puede estar cómodos de a dos, si puedo, si quiero. 

viernes, 25 de enero de 2013

La traducción de mierda que todos esperaban.

La línea de sombra

La línea de sombra, la niebla que me veo por delante. Por primera vez en mi vida me encuentro sabiendo lo que dejo y no sabiendo imaginar lo que encuentro.
Me ofrecen un cargo de responsabilidad, llevar esta nave hacia una ruta que nadie sabe.
Es mi edad en el aire, en esta condición de estabilidad precaria. Hipnotizado por las aspas de un ventilador en el techo, doy vueltas en mi cama, me muevo con pasos pesados en esta habitación húmeda de un puerto cuyo nombre no recuerdo. El fondo del café confunde el dónde y el cómo, y por primera vez sé qué es la nostalgia, la conmoción.
En mi equipaje ropa sucia de navegación, por cada rotura un puerto, y por cada puerto una canción en la cabeza.
Es dulce estar en el mar cuando son otros los que eligen la dirección, sin preocupación, sólo hacer lo que hay que hacer, y acunados por las olas nocturnas soñar con mamá… El mar.
Me ofrecen un cargo de responsabilidad. Me dijeron que hay un barco que necesita un comandante. Me dijeron que la paga es interesante, y que la carga es secreta e importante.
La idea de la responsabilidad se hizo grande.
Es como tener que saltar más allá de una zanja que me separa de los tiempos despreocupados de un pasado que ha pasado, saltar hacia el tiempo indefinido del ser adulto.
Frente a mí, la niebla esconde la respuesta a mi miedo. ¿Qué voy a ser? ¿A dónde me va a conducir mi naturaleza?
La cara de mi padre toma forma en el espejo; él joven, yo viejo. Sus palabras que retumban en mi oído: “La vida no es fácil, hay que hacer sacrificios. Un día te vas a dar cuenta y me vas a decir si tengo razón”.
Llega un día en que hace falta tomar una decisión, y ahora es este día de monzón, con el viento que no tiene dirección. Mirando el cielo, un sentimiento de opresión.
Pero es mi edad, en la que se sabe cómo se era pero no se sabe a dónde se va, qué se va a hacer, qué responsabilidades se tiene frente a los seres humanos que viven a tu lado.
Y a través de este cristal, veo el mundo como un tablero donde cada movida que haga puede cambiar el partido entero, y tengo miedo de ser comido, y tengo miedo también de comer.
Me pierdo en las lecturas, los libros del Zen y el Evangelio, la astrología que me cuenta el cielo.
Floto en busca de un “yo mismo” con quien poder dialogar, pero esta línea de sombra no me deja encontrarlo.
Me ofrecen un cargo de responsabilidad. No sé qué es el coraje, si agarrar y largar todo, si elegir la fuga, o afrontar esta realidad difícil de interpretar pero linda de explorar. Tratar de imaginar qué voy a ser cuando haya cruzado el mar, llevado esta carga importante a destino, dónde voy a estar al reparo del próximo monzón.
Me ofrecen un cargo de responsabilidad. 
Mañana voy a ir al puerto y les voy a decir que estoy listo para partir.
Voy a echar el equipaje al mar, estudiar las cartas, y esperar a saber hacia dónde se parte, cuándo se parte, y cuándo va a pasar el monzón.
Voy a decir: “Leven anclas, derecho, a toda marcha. Ésta es la ruta, ésta es la dirección, ésta es la decisión”.



lunes, 31 de diciembre de 2012

Creo que tengo una relación abusiva con Lena Dunham*.

Me rehusé por meses a ver Girls porque el poster es malísimo. Cuatro pibas lindas mostrando las piernas. Minitez contemporánea, Sex & the City para adolescentes. Título   genérico. Paso.
Pero hombres en los que confío insitieron, y la miré. 

Fue horrible.

Sí, me gusta el programa. Sí, está bien hecho. Pero sufrí terriblemente los primeros capítulos porque soy Hannah. Es una idiota, es un parásito arrogante, y soy igual. 
Ah, no. Porque resulta que Hannah es una idiota, pero es dos años menor que yo, vive sola, tiene un título universitario**, un laburo*** y un novio****. Soy Hannah pero peor. Mátenme.
Resulta, sin embargo, que aparentemente todas las mujeres sufrimos terriblemente con Girls. Los varones pueden distanciarse un poco, y aunque se reconocen "en ese momento de sus vidas" no los mata la identificación. Bastardos suertudos. No les duele el grotesco en el fondo del alma. Les da vergüenza ajena, no propia. 
Todo el mundo habla de las escenas de sexo espantosas. Descubrí que lo que me generan es, de alguna forma, arrepentimiento. Mátenme.

Ahora bien: Lena Dunham tiene mi edad y un contrato de 3.500.000 dólares para escribir un libro. Tiene huevos de plomo, nada de celulitis, y filma como una campeona.
Me hace sentir horrible con mi vida. 
La amo y quiero ser como ella, pero cuando la veo actuando también la odio y me aterra ser como ella. 

No es casual que se me mezclen Lena Dunham y todos sus personajes. Es un efecto claro y buscado de decisiones de guión, casting, y puesta en escena. La línea entre la actriz, la directora, la guionista y los personajes está embarradísima. No soy yo que soy pelotuda, es algo que me hacen deliberadamente. Me pregunto si no es esa tensión, entre la maravilla y la repulsión, lo que atrae de esta piba. 

Pienso en todos los escritores que te hacen eso, el anzuelo de lo semiautobiográfico, y como te desestabiliza todo. Pienso en la crítica de Katie West sobre Overqualified, de Joey Comeau:
I think the book is about Joey Comeau and that’s my problem with it. I want to know what is truth! I want to know where the real Joey is. I want to dissect every letter and figure out what really happened and what didn’t. What’s real and what’s not. I want to figure out what we have in common. I want to know why it is exactly that Joey Comeau can be so very dirty and still make me feel sad. Why does his letter to Hallmark make me feel so uncomfortable laughing about International Stalker Day? Why am I identifying with his letter to Gillette and why am I too, hoping for blood swirling down the drain? Stop making me imagine her flavours while you lay your flesh on her tongue! Stop making me worry about how often I talk to my grandparents and stop making me remember everything I’ve never asked them! Stop making me miss my brother! Stop convincing me of the last girl! Nothing lasts forever! I hate you Joey Comeau. I hate you and I hate your stupid book. 
Overqualified, como todo lo que escribe Joey Comeau, es espectacular en su obscenidad. Muestra cosas que no debería mostrar, que uno no está listo para ver. Es demasiado íntimo. Duele porque al hablar de sí mismo te obliga a ponértele frente a frente. Te obliga a admitir cosas que uno no está listo para admitir. Es decir, te manipula horriblemente, te entrampa en "la identificación", ese mito, esa porquería. Te hace mierda. Y es bellísimo.

Me quejo de la identificación porque creo que no debería ser la medida ni el objetivo de la literatura pedorra que hacemos. No quiero seguir leyendo ni escribiendo "cosas que nos pasan a todos", o peor, "a todas". Sin embargo, quisiera pensar seriamente qué es eso que me pasa con Girls, que me hace sentir espantosamente mal pero me tiene contando los días para la próxima temporada. Qué hace el hijo de puta de Joey Comeau para que todos nos queramos casar con él, y sobre todo cómo lo hace. No les tengo rencor, sólo quiero aprender. 


*       And if she can pull off red lipstick, so can I!
**     Yanqui.
***   Pedorro.
**** Loco de mierda. 

viernes, 30 de noviembre de 2012

domingo, 18 de noviembre de 2012

De amicitia.

Pocas cosas me sulfuran, me indignan y me espantan tanto como tener que pelearme una y otra vez con gente que asegura que no existe la amistad entre el hombre y la mujer. Y si bien cada día le pido al Gauchito Gil la serenidad para no caer en discusiones de sordos, quién te salva de despotricar después, sola, mientras te cepillás con furia los dientes.


1. En primer lugar, no acepto que nadie me diga lo que siento hacia terceros, ni lo que ellos sienten hacia mí. 

2. Tengo la suerte de compartir mi vida con un montón gente buena, inteligente, divertida y talentosa. Los quiero y los admiro, y enriquecen todos mis días. Algunas son mujeres y otros son hombres. 
Si nunca quisiste a alguien del sexo opuesto, jodete por boludx. 

3. No acepto que nadie rechace de plano evidencia empírica para proteger sus afirmaciones de mierda. 

4. Idea heteronormativa por demás. ¿Qué pasa si me gustan las mujeres? ¿Tampoco puedo ser amiga de ellas? ¿Y si sos bisexual, no podés ser amigo de nadie?

5. Los que dicen que no existe la amistad entre el hombre y la mujer después te dicen que las mujeres tampoco pueden ser verdaderamente amigas entre ellas, porque son celosas, competitivas, y conchudas en general. La amistad es un privilegio de almas nobles masculinas, inexplicablemente relacionado con el deporte y el consumo alcohólico, y no lo entenderemos jamás. 

6. Si las mujeres no pueden tener amigos es porque los supuestos amigos las desean secretamente (no al revés). O sea, nadie te va a querer nunca. ¿Sabés por qué? Porque tenés tetas. 

7. Debe ser eso lo que más me horroriza. No quiero imaginar qué clase de relaciones tiene la gente que en verdad cree que el cariño y el deseo son mutuamente excluyentes. 

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Viñetitas de mierda: Waso no sabe la leyenda del lobizón.

M: ¿Cómo no lo sabías?
L: ¿No te lo enseñaron en la escuela?
W: No me lo enseñaron en la escuela, y no me lo enseñaste vos, que sos la que me tiene que enseñar las cosas. 
M: Lucas, te enseñé a hacer pis.