viernes, 16 de julio de 2010

Late Night with Gauchito Gil.

Gauchito Gil, Gauchito Gil,
mandame un pibe.
Uno cualquiera
pero que tenga olor a varón,
a desodorante y ropa de varón.
Los que te acercás y tienen ese perfume
que hace que se te hundan las costillas
como la desesperada que sos.

lunes, 12 de julio de 2010

Voy a esperar, si es necesario.

Hay muchas situaciones que te llevan a pensar "basta pelotuda, andate a dormir". Muchísimas.
Pero cuando de golpe te acordás de la canción de Dawson's Creek (!), y pensás "uy, man, tal cual: I don't wanna wait!", bueno.... eso es, cuanto menos, alarmante.

Miré ese programa como cualquier hijo de vecino, y lo odié con furor. Lo odié más que cualquier hijo de vecino, porque ese cachivache interminable pretendía representar a todos los adolescentes como uno, a la auténtica adolescencia sensible e inteligente, en oposición al glamour falluto de 90210.
Odié cada segundo que Dawson apareció en pantalla. Odié el moralismo, la pedantería, la volubilidad, el puritanismo, y odié que el programa tratara de predicar todo eso de mí.
No sé que motiva a los adultos a escribir historias sobre qué es ser adolescente para que consuman los adolescentes. No sé a qué niño le interesa que le hablen sobre lo que es ser niño. Creo que es la gente a la que le gusta El principito, no sé.
Pero hay algo profundamente insultante de un culebrón que se vende como retrato generacional, especialmente cuando es sobre adolescentes porque seamos sinceros: los adolescentes son un asco. Lo sabemos ahora, y lo sabíamos entonces. Éramos un grupo etario asqueroso, y estaba bien, pero no hacía falta que nos lo echaran en cara.

Así que retomando: me rehúso a sentirme identificada con CUALQUIER aspecto de Dawson's Creek. No no y no.

sábado, 3 de julio de 2010

Limpieza semanal.

Sosteniendo el mantel con una mano, uso la otra para pasarle la aspiradora a la mesa. Pienso: "Mi vida es un chiste de gallegos.".
Después tiro al piso el paquete de galletas de agua que había originado buena parte de las migas que estaba aspirando. Me corrijo: "Mi vida es un capítulo de Mr. Bean. Repetido.".
Me agacho y le paso la aspiradora al parquet.

viernes, 2 de julio de 2010

La morocha tarada.

Una, que sabe que su inteligencia es directamente proporcional a la distancia de cierta gente, debería estar más alerta y controlarse un poco mejor.
¿No?

domingo, 27 de junio de 2010

Chat con el G.G.

Laui dice:

Debo haber comprado

cinco o seis veces

esos dinosauritos de goma que ponías a la noche en un bowl

con agua

y al día siguiente estaban hinchados y pálidos

medio babosos

como los ahogados en la tele.

Había toallas también

compactadas con forma de Mickey

ponele

o de autito.

Te imaginabas un toallón de playa. Era un trapito.

Fino

y perfectamente inútil.


Gauchito Gil, Gauchito Gil,

copate

mandame una palangana

milagrosa

pongo mis tres páginas y media

me las duplicás para mañana a la mañana.

Yo me tiro un rato.

Porfa.

sábado, 26 de junio de 2010

Vivir en un edificio.

Que a cualquier hora del día, inexplicablemente, siempre alguien esté hirviendo coliflor en algún piso, es menos grave que que todo el edificio decida al mismo tiempo cocinar cosas riquísimas, con perfumes calentitos que te hacen babear mientras caminás por el pasillo y cuando llegues a tu cocina haya sólo galletas de agua, un pollo congelado, y una tonelada de condimentos.

martes, 22 de junio de 2010

Temporada de monografías.

Mejor pónganse a salvo.